NARCISAZO: LA HISTORIA DE UNA TESIS MUY DESLUCIDA

Esta mañana estaba presentando el Señor Marino Zapete, en su programa de televisión “El Despertador,” una entrevista con la Señora Altagracia Ramírez, esposa del desaparecido profesor Narciso González y la verdad que al escuchar a esa señora hablar con tanta dignidad y admiración sobre la figura y condiciones morales de la pareja que le fuera arrebatada, no da menos que vergüenza la actitud del Estado Dominicano ante los hechos relativos a la “desaparición” del referido líder.

El presidente Leonel Fernández y muchos miembros de su equipo de gobierno fueron compañeros en las aulas de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) del profesor Narciso González; muchos de esos lacayos fueron “amigos” personales del desaparecido profesor Narciso González; otros de esos seres miserables incluso visitaban el hogar y compartían con la familia del profesor Narciso González y no dudamos que muchos de esos seres inferiores, porque sólo así puede calificarse al traidor, hayan llegado a cargar en sus espurios brazos a los hijos del profesor Narciso González, sin sentir hoy día la más mínima muestra de remordimiento o vergüenza.

Hoy me siento avergonzado de compartir la nacionalidad dominicana con gente de tan baja naturaleza, gente, (sí es que se pueden considerar como gente a aquellos que han deshonrado a sus hijos, sus familias y sus amigos con la traición total a aquellos principios que resultan inviolables en una sociedad que se precie de organizada) que no se respetan, ni tienen el más mínimo respeto por los hombres y mujeres honestos.

Hoy siento asco de tener que llamarle dominicanos a aquellos que por sus acciones no tienen escapatoria a un futuro que los juzgará en sus estaturas de enanos morales, que pretenden ocultar un crimen horrendo (no hay acción más criminal que la que pretende amordazar las ideas) con una absurda tesis de “depresión crónica” enarbolada por el “periodista” Oscar López Reyes y abrazada por el gobierno de turno, al cual le queda muy deslucido el papel de ocultar el que fuera el crimen de despedida del Dr. Joaquín Balaguer Ricardo, quien en su lugar en el infierno debe continuar riéndose de todos los que sí podemos llevar la nacionalidad dominicana con orgullo.

Señor presidente, ésta de verdad le queda muy deslucida.

2 Responses to NARCISAZO: LA HISTORIA DE UNA TESIS MUY DESLUCIDA

  1. Pedro Cabrera dice:

    El profesor Narciso González fue secuestrado, torturado, asesinado y desaparecido

    Jueves, 12 de Agosto de 2010 17:00
    Patricia Báez Martínez

    El abogado Tomás Castro Monegro lanzó pestes contra Balaguer, algunos acólitos civiles y militares, y hasta contra Roberto Santana, reconocido ex dirigente revolucionario, con relación a la desaparición de Narciso González (Narcisazo), de quien dijo, en el programa El Gobierno de la Mañana, que fue secuestrado, torturado, asesinado, “y posteriormente desaparecieron su cadáver”.

    “Dos personajes participaron activamente en el apresamiento de Narciso González: Un señor que se llama Héctor Nina y otro individuo que le apodan “José Cabeza”, eran dos dirigentes reformistas, bandoleros, que recibían las instrucciones de Claudio de los Santos (allegado del Presidente y padre de la actual sub-secretaria de Obras Públicas, Claudia Franchesca de los Santos).”.

    Según Castro Monegro, Claudio de los Santos está muy implicado en la trama que dió fin a la vida de Narcisazo. Dijo que un reo de la cárcel de La Victoria, José Ramón López Hidalgo, confesó a la Comisión de la Verdad, que De los Santos y un tio suyo, un sargento de la FAD, lo visitaron y le entregaron 175 mil pesos a cambio de que cuando fuera llevado al Palacio de Justicia gritara ante los periodistas que Rafael Guerrero Peralta (ex jefe de la Policía Nacional) y Juan Bautista Rojas Tabar (jefe de la FAD al momento de la desaparición de Narcisazo) habían sido los autores intelectuales de la muerte del catedrático.

    La Comisión de la Verdad considera que éstos no son los autores intelectuales, sino cómplices. Y se basan para ello en las pruebas que ha podido recabar, muchas de ellas ya desaparecidas por los organismos de seguridad, pero que la que la comisión pudo documentar antes.

    Entre esas pruebas o hechos están:

    Primero: un conduce en el que el encargado de transportación del Banco Central le entrega el vehículo en que fue secuestrado Narcisazo al hijo del ex presidente del Banco Central Mario Read Vittini, Mario Luis Read Escobar (la viuda de Mario Read Vittini, Carmen Escobar, llamó al programa para defender la memoria de su esposo). El vehículo es una jeppeta, placa oficial 11172, perteneciente al Banco Central y asignada en ese momento al hoy contraalmirante Luis Rafael Lee Ballester.

    “Había un conflicto porque el hijo de Don Mario quería usar él la jeppeta, por lo que el Banco Central le buscó un vehículo adicional para dejarle la jeppeta a Lee Ballester”.

    Segundo: “Cuando llaman a la casa de Taty, el día 27, le dicen que se movilice rápido porque (Narcisazo) estaba en muy mal estado, que fuera rápido a la Policía que lo tenía el mayor Acosta. Resultó que habían dos mayores de la Policía que se llamaban Acosta: Acosta Cuevas y Acosta Acosta. Uno asignado al Banco Central y otro como oficial de la Policía en Puerto Plata”.

    Tomás Castro siguió contando que la esposa del que estaba de puesto en Puerto Plata contactó con la Comisión de la Verdad, preocupada porque su esposo había recibido la orden de viajar una noche a Moca y posicionarse en el destacamento de allá, y ella temía que fuera para asesinarlo por tener informaciones de los últimos momentos del profesor.

    Tercero: La muerte del capitán de la Fuerza Aérea, Ferrera Batista, que estaba asentada -con sus causas, incluso,- en el libro de novedades de esa institución antes de que ocurriera, hecho que luego fue borrado con «liquid paper».

    “El capitán de la Fuerza Aérea Dominicana Ferrera Batista, que por un acto inconsciente de él, va y entra al A2 y ve a Narciso González ahí, y le pregunta: profesor ¿y qué hace usted aquí? Y es luego cuando se da cuenta que ha cometido un error”. Ferrera Batista (Batistica) supuestamente murió en un accidente de tránsito. El Hospital de las Fuerzas Armadas certificó que murió por un trauma craneal.

    Sin embargo, la Comisión de la Verdad logró exhumar el cadáver y su cráneo estaba intacto, y el médico patólogo actuante en la exhumación determinó que a este oficial lo arrollaron con un vehículo pesado que le rompió casi todas las costillas y que una de ellas le perforó un pulmón, causándole una hemorragia interna.

    La tarde en que desapareció Narcisazo
    “Narciso, ese día, el día 26 de mayo, estuvo en el hipódromo Perla Antillana esa tarde. Salió del hipódromo -de todo eso hay testimonio- y en la Ortega y Gasset, esquina 18, tomó una guagua del transporte público y se quedó en el parquesito de la 27 de febrero con Tunti Cáceres, el parquesito Braulio Alvarez, en ese lugar fue contactado por una persona, funcionario del gobierno de Joaquín Balaguer de entonces, y un alto dirigente del sindicato de la Corporación Dominicana de Electricidad (Sitracode). Parece que le estaban dando seguimiento a Narciso, porque posteriormente de ahí él se va al Cine Doble a ver la película «Philadelphia», y varias personas no sólo lo vieron en el cine, sino que conversaron con él, y -entonces- luego dos personas son los que dan el número de la jeppeta en que secuestran a Narciso, y llama y dice que una jeppeta, da el número de placa, estaban golpeando a un individuo y lo metieron de manera violenta en el vehículo, en la 27 de febrero frente a la Clínica de Otorrinolaringología, pero ¿tú sabes a donde lo llevaron cuando lo apresaron ahí? Al Palacio de la Policía. Lo llevan al Palacio de la Policía y el testimonio que da Junior Sarita Lebrón, confidente policial, en término llano: calié de la Policía, que estaba en la casa de guardia del Departamento de Robo de la Policía, narra que estando él ahí llevaron a Narciso González, muy golpeado, y que el sargento de guardia no quería recibirlo en esas condiciones, pero luego de una llamada telefónica le dan las instrucciones al sargento para que le den entrada a Narciso González y luego posteriormente las mismas gentes se lo llevan… De ahí lo llevaron… fue todo un periplo, porque nadie lo quería recibir…

    Castro Monegro acusó a muchas personas más: a un hermano del ex director de la DNCD, Rafael Ramírez Ferreiras; también al ex dirigente de izquierda y ex rector de la UASD, Roberto Santana, de quien dijo que llevó a donde Guaroa Liranzo una grabación de una intervención de Narcisazo, en el Paraninfo de Economía, en contra de la reelección de Balaguer.

    Y siguió acusando.
    “Si el Presidente si dispusiera a castigar el crimen, Carlos Morales se queda sin asistente; el secretario de Obras Públicas sin encargado de Seguridad; y la constructora Malespin va a tener que buscar un nuevo presidente”.

    Con estas declaraciones, Castro Monegro fortalece la tesis de que la desaparición de Narcisazo es un crimen de Estado, ocultado por el Estado.

    El abogado tildó de íncubo a Jimmy Sierra, amigo de Narcisazo, y quien hoy sostiene la tesis de que éste se suicidó por varios fracasos profesionales y personales, entre los que insinúa infidelidades de su pareja.

    Un íncubo, según el diccionario de la RAE, es un demonio, “diablo que, según la opinión vulgar, con apariencia de varón, tenía comercio carnal con una mujer”.

    ¿Por qué el Gobierno actual se prestaría a seguir protegiendo a los autores intelectuales y materiales de este crimen? “Para evitar que las alianzas políticas se rompan, porque hay intereses grandes y poderosos (entre el PLD y el PRSC)”.

    • Ramón dice:

      Hermano Pedro, agradezco ese reporte detallado que provees.

      Precisamente eso es lo preocupante de lo que ha pasado a ser la clase política dominicana. Se trata de un grupo homogéneo de delincuentes, que han llegado a despreciar cualquier valor, en el camino para llegar y mantenerse en el poder.

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